Según los resultados de un estudio realizado por la Universidad de Auckland y que se basa en una serie de datos de un satélite de la NASA, ha habido una descenso de unos 30 metros en la altura media de las nubes durante los últimos 10 años. Esto se debe a una menor densidad de nubes en las altitudes mayores.
A pesar de algunas interrupciones, coincidiendo con los fenómenos de El Niño y La Niña en el Pacífico, hay una caída constante cada año. Esta caída implicaría grandes cantidades de radiación que podrían inducir efectos negativos relacionados con el calentamiento global.
Los datos analizados provenían de satélite Terra de la NASA, un satélite heliosincrónico de investigación científica orbitando la Tierra desde el año 1999 y buque insignia del Sistema de Observación de la Tierra (EOS).
"Esta es la primera vez que hemos sido capaces de medir con precisión los cambios en la altura de las nubes a nivel mundial, aunque el registro es demasiado corto para ser definitivo, proporciona un indicio de que algo muy importante podría estar pasando", dice el investigador principal, el catedrático Roger Davies.
"Las nubes son una de los mayores problemas a la hora de predecir el tiempo. La altura de las nubes es muy difícil de modelar y por lo tanto no ha sido considerado en los modelos del clima. Por primera vez hemos sido capaces de medir con precisión la altura de las nubes sobre una base global, y ahora el reto será incorporar esa información en los modelos climáticos. Además, proporcionará un control sobre cómo se están haciendo otros modelos, y en última instancia puede dar lugar a otros mejores", explicó.
Vía | Universe Today, NASA
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